Figuras amenazantes, apocalíticas, seductoras, con toques eróticos; con toques mecánicos. Surrealistas, dignas para provocar una noche de pesadillas.
Sus trabajos los encuentran en portadas de libros (uno de ellos es El Museo de los Horrores de H. P. Lovecraft. Ed. Edaf), portadas de discos (Danzig, Carcass) y por supuesto en el museo dedicado a su trabajo en Suiza.
Una muestra de su espectacular trabajo y me cuentan qué les parece, a quienes no lo conocen y quien obvio, saben quién es, díganme si no han caído en sus garras pesadillescas!!!!