incepto tantummodo opus est

domingo, 2 de septiembre de 2012

Time Out

Bien, señores! Ha llegado el momento de deconectarme (tecnológicamente hablando); he hecho la maleta que me acompañará, fue todo un caso hacerla!! Es la primera vez que empaco para esos menesteres y les aseguro que no tengo ni la menor idea de a dónde voy y qué me espera.
No soy fan de los hospitales y he tenido problemas con eso, me han llevado a fuerza a ver a mi madre, con mi padre ni siquiera puse un pie y con mis hermanos, fue meramente obligación (sin serlo tal cual) el ayudar. Pero, yo, en un hospital?! Ja! Nunca! He apostado con médicos con tal de no quedarme a pasar la noche (sólo fue una ocasión), me negue rotundamente y preferí hacer pasar por una gran desvelada a todos en casa. Pero en el hospital, no!.
Y ahora, miren a dónde voy.. y para colmo, en el bien famoso por sus carencias, imss. Por supuesto, en balanza, la atención hacia lo que tengo, es mil veces mejor ahi que en el privado.. pero en atención personal, pff!! dicen que dejan mucho que desear. Lo corroboraré en carne propia.
No, aun no estoy nerviosa, es más, estoy bastante tranquila; lo que me preocupa son cosas estúpidas como el no poder leer, hacer nada, durante tantas horas (antes de la cirugia por supuesto), es mas, riánse, pero me preocupa si me desnudan los pies... yo no sé andar sin calcetines!! Saben que tengo los pies de muerto? HE-LA-DOS siempre. Por lo tanto, siempre, siempre procuro dormir con calcetines. Y entonces? qué carajos haré?
Ya, en serio, algo que no es nervio, honestamente es temor lo que le tengo es la anestesia general. No sé, tantas palabras flotan hacia mi que es dificil no formar un miedo. No, no es al dormir ni lo que pueda pasar en la mesa (digo, lo que pase ni siquiera lo notaré), es al despertar; que si la boca seca, que si el mareo, que si las molestias de la cirugia, que no te puedes mover sola, que las enfermeras son poco menos que hijas de Lucifer, etc. Eso es lo que ronda mi mente... y no estar en mi zona de comfort. Obvio.
Razonamiento antes que vehemencia. Cerebral antes que visceral.
Asi, pues, estoy segura que ustedes estarán más preocupados, la ignorancia puede ser muy buena o muy mala consejera. Lo siento, intentaré compensarlo.
Confesión, el primer pinchazo de hielo en el estómago fue directo gracias a las palabras de Iker (no los veré hasta el miércoles o jueves) y con la naturaleza que le da su inocencia, se ha acercado a mi y me ha dicho "te voy a extrañar mucho Tita, te voy a dar algo para que no me extrañes" (eso fue un nudo en la garganta?)
Pero bueno, he aquí las últimas letras de la tanda que les he puesto para que ustedes, tampoco me extrañen. Espero, estar de vuelta lo antes posible para contarles toda mi aventura y sobre todo, festejar a lo grande el desalojo!!